Hace no mucho, Russell Wilson era uno de los jugadores más valorados de la NFL: con los Seahawks ganó un Super Bowl, dos veces la Conferencia Nacional y lideró a su equipo ocho veces a los playoffs. Pero desde el 2021 la relación con su entrenador en jefe, Pete Carroll, se deterioró rápidamente, y el mariscal de campo buscó un camino de salida.
Los Broncos de Denver recibieron felices a Wilson y tan contentos estaban con tenerlos entre sus filas que le firmaron un contrato de cinco años y un total de 245 millones dólares.
Pero la relación deportiva y laboral entre Russell Wilson y los Broncos fue un verdadero fracaso, uno que pasará a la historia por todo lo que sacrificó Denver para contratarlo y por el pésimo rendimiento del veterano quarterback, al punto que fue relegado a la banca en la parte final de la temporada 2023.
Como era de esperarse, Denver buscó deshacerse del quarterback de 35 años, quien finalmente logró un acuerdo de un año con los Pittsburgh Steelers.
Y acá viene lo más sorprendente y que marcará a los Broncos por mucho tiempo: los Steelers le pagarán 1,2 millones de dólares (que es el mínimo legal para un jugador veterano) mientras que desde Denver le abonarán 37,8 millones dólares para que juegue por otro equipo.
No solo es un monto gigantesco el que pagará Denver, sino que, además, le comerá el 14% del monto que los Broncos pueden destinar a salarios de los jugadores que sí defenderán sus colores.
Un error histórico
Situaciones como estas no son necesariamente anormales, pero el monto que pagarán los Broncos a un jugador de otro equipo claramente quedará como uno de los grandes errores de la historia del deporte de EEUU y del mundo.
Por el lado de Pittsburgh es todo lo contrario, ya que por un monto mínimo sumaron a un mariscal de campo veterano y al que le pueden sacar rendimiento ya que tienen un esquema ofensivo similar con el que Wilson triunfó en Seattle.
Y si a Russell ya no le queda nada más en el estanque, solo será un contrato por una temporada y los Steelers pueden volver al joven Kenny Pickett, quien aunque sin brillar ha sido el titular en las últimas dos temporadas.