El plan de Ronaldo para tomar el mando del fútbol brasileño

Brasil atraviesa uno de los momentos futbolísticos más delicados de los últimos años, una situación que ha despertado el interés de Ronaldo Nazário, leyenda del fútbol mundial, por asumir la presidencia de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).

El exdelantero y bicampeón del mundo no solo busca solucionar la crisis institucional que arrastra la CBF desde hace más de una década, sino también restaurar el prestigio deportivo de la selección nacional. O Fenómeno no está solo en su aspiración; cuenta con el respaldo de figuras de peso en el mundo del fútbol y la política brasileña, como Andrés Sánchez, ex presidente del Corinthians y aliado del presidente Lula da Silva.

Ante este panorama caótico, el brasileño aparece como un candidato capaz de dar un golpe de timón para devolver la estabilidad y grandeza a la Confederación Brasileña de Fútbol. Una de las prioridades de su proyecto es atraer a Pep Guardiola, actual entrenador del Manchester City, para dirigir a la Verdeamarela de cara al Mundial 2026.

La relación entre Ronaldo y Guardiola no es nueva. Ambos coincidieron como jugadores en el Barcelona a finales de los años ‘90 y mantienen un vínculo cercano desde entonces. Según trascendidos, las primeras conversaciones entre ambos ya habrían tenido lugar. La idea de Ronaldo es convencer al técnico catalán para que tome las riendas de la selección cuando finalice su contrato con el Manchester City.

Guardiola, considerado uno de los mejores entrenadores del mundo, ha ganado 32 títulos importantes en su carrera, incluidos campeonatos de liga en España, Alemania y la Premier League, así como tres Ligas de Campeones. Su estilo de juego innovador y exitoso lo posiciona como el candidato ideal para liderar una nueva era en el fútbol brasileño. Ronaldo apuesta a que su figura pueda devolverle a Brasil el protagonismo internacional perdido en la última década.

“Pensar en empezar en otro sitio, en todo el proceso de formación y entrenamiento… ¡no!”, dijo recientemente Guardiola en una entrevista con el chef Dani García, dejando abierta la posibilidad de dirigir una selección nacional. “Tal vez una selección nacional, es diferente. No es el día a día”, agregó el catalán.

Sin embargo, en una conferencia posterior a una derrota por goleada ante el Sporting de Lisboa en la Champions League, Guardiola respondió con ironía cuando le preguntaron sobre una posible llegada a la selección brasileña. “Después de perder 4-1 ya no soy una opción para Brasil. Más que nunca quiero levantar al Manchester City y devolverlo a su máximo nivel”, afirmó.

Con estas declaraciones, aunque ambiguas, Guardiola demuestra que mantiene las puertas abiertas para un futuro en el fútbol de selecciones, aunque aún no sea el momento oportuno. Un proyecto ambicioso para la Verdeamarela.

La visión de Ronaldo no se limita a un cambio en el cuerpo técnico. Su intención es reformar profundamente la estructura del fútbol brasileño y restaurar la reputación de la CBF. Con el apoyo político de Andrés Sánchez y otros aliados estratégicos, el ex goleador buscaría transformar la organización en una entidad más transparente y eficiente. Para llevar a cabo cambios contará con “fichajes increíbles” y que se seguramente en su programa tendrá “una participación muy importante de campeones del mundo”.

En el corto plazo, Dorival Júnior, el actual entrenador de Brasil, podría verse reemplazado si Guardiola acepta finalmente el desafío. La llegada del catalán no solo significaría un salto de calidad para la selección, sino también un mensaje de que Brasil está listo para competir nuevamente al más alto nivel.

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!