El tapatío expuso que aunque ganó el segundo lugar de la carrera su desempeño y confianza cayeron, derivando en un mal desempeño.
Después de Miami las cosas fueron cuesta abajo. Tenía un monoplaza diferente que ya no me iba tan bien. Luego no pude entrar en la Q3 varias veces, por lo que mi confianza decayó. Como resultado, la conducción también fue mucho peor”, expuso al medio neerlandés De Limburger.
‘Checo‘ Pérez reveló que su mal estado de ánimo incidió negativamente en su relación con su esposa e hijos, por lo que buscó ayuda con un coach mental.
Contraté a un entrenador mental porque mi familia merece tener a ese padre alegre en casa. Junto con mi entrenador trabajé para convertirme en la mejor versión de mí mismo en casa, pero también como piloto”, destacó.
Reencontrada la positividad, el piloto de Fórmula 1 afirma que sigue aprendiendo todos los días y que se siente “de nuevo al 100 por ciento”; tanto así que cree tener la oportunidad de pelear por el título el año próximo.
Con información de Marca