Real Madrid le ganó al Chelsea 2-0 este miércoles por la ida de los cuartos de final de la Champions League, en un partido que sobre el final registró una secuencia que, por más que no tuvo incidencia alguna en el resultado, no tardó en viralizarse.
El arquero español del cuadro azul, Kepa Arrizabalaga, buscó con el pie a su compañero Reece James pero el envío se fue un poco largo. El lateral apenas llegó a peinar la pelota, que se perdió afuera y fue a parar justo donde estaba el entrenador rival.
Lejos de amilanarse por la llegada del objeto más preciado en cualquier partido, Carlo Ancelotti lo trató como cuando era futbolista. Aquel mediocampista central que brindó su buena técnica a Parma, Roma y Milan, contró con el zapato derecho, levantó con el izquierdo, acomodó de muslo y pasó de empeine a Dani Ceballos.
Si bien el jueguito de Ancelotti pasó inadvertido para el relator y comentarista de ESPN, el público en el Bernabéu lo celebró como un caño o una gambeta.