Shaquille O’Neal es una leyenda de la NBA. Ganador de cuatro anillos de campeón gracias a sus tres títulos con Los Ángeles Lakers y uno más con el Miami Heat, el paso del gigante de 2.16 metros nunca pasó desapercibido en la mejor liga de básquet del mundo. Lo mismo sucedió con su figura, una vez retirado, ya que se convirtió en un hombre de negocios y DJ Diesel, el apodo que utiliza para pasar sus remixes de música electrónica en festivales.
Más allá de su atractiva personalidad, Shaq es una persona que siempre estuvo atento en hacer valer su fortuna. Así fue como, con el paso del tiempo, el ex pivot del Orlando Magic realizó inversiones que le permitieron construir un verdadero “imperio inmobiliario”, como lo describió el New York Post en un artículo en el que destacó las mansiones que tiene en su poder.
Si bien no pudieron profundizar en la totalidad de las residencias a su nombre, el medio de los Estados Unidos reconoció que los registros públicos indican que el ex basquetbolista es propietario de nueve lujosas propiedades repartidas por cuatro diferentes estados (Nevada, Texas, Georgia y Florida) En este contexto, Shaquille tuvo una profunda reflexión sobre la forma en la que encaró una parte de su vida con su familia.
En el podcast que conduce, la figura al que le acaban de retirar la camiseta número 32 con la que tuvo su estreno en la NBA en Orlando, le dejó un consejo a Jason Kelce, el hermano de Travis -pareja de Taylor Swift-, que juega en los Philadelphia Eagles de la NFl. “Cometí muchos errores tontos hasta perder a mi familia y no tenía a nadie. Ese no es tu caso. Así que disfruta de tu hermosa esposa, disfruta de tus hermosos hijos y nunca te detengas en lo que tuvimos”, le dijo O’Neal a Kelce en “The Big Podcast with Shaq”.
“Lo que teníamos es lo que tenemos: obtuviste el anillo (del Super Bowl), la gente sabe quién eres, disfrútalo. Porque, repito, fui un idiota y hablé de ello durante mucho tiempo. Amo a toda mi familia. Pero estoy solo en una casa de 100,000 pies cuadrados”, reflexionó el jugador que dominó la zona pintada de la liga estadounidense por más de una década.
En los últimos tiempos, después de vender su mansión en Orlando, Florida, la leyenda de la NBA adquirio una propiedad de cinco dormitorios y seis baños en Dallas (más de 5200 pies cuadrados). A esto, hay que sumarle una residencia de casi 2 mil metros cuadrados en Sugar Land, Texas, y otra de más de 1.400 m2 en Las Vegas, Nevada, que se destaca por ser moderna y elegante que compró en 2021.
Hay que recordar que Shaquille fue contundente hace algunos años sobre la fortuna que logró a lo largo de su gloriosa carrera deportiva y cómo la heredarán sus seis hijos: Shareef, Shaqirl, Me’arah, Myles, Taahirah y Amirah. “Ellos son mayores ahora. Se enfadaron conmigo. No estoy realmente molesto, pero no entienden. Les digo todo el tiempo. ‘No somos ricos; yo soy rico’”, dijo en pleno escenario durante el vivo del podcast Earn your leisure que tiene al asesor financiero Rashad Bilal y el educador Troy Millings como sus anfitriones.
Se estima que Diesel tiene una fortuna de más de 400 millones de dólares. “Debes tener una licenciatura o una maestría y luego, si quieres que invierta en una de tus empresas, tendrás que presentarla, tráemelo”, agregó el ex jugador que fue elegido en el primer puesto del Draft 1992 por los Orlando Magic, franquicia en la que jugó hasta que fue reclutado por Jerry West para los Lakers.
“Me gustaría un médico, un farmacéutico, un abogado, alguien que sea dueño de varios negocios y alguien que se haga cargo de mi negocio. Pero les digo que no se lo voy a dar. Tenés que ganártelo”, agregó el hombre que sobrepasó el mundo del básquet para ser una personalidad reconocida en todo el mundo por sus dichos.