Sergio Pérez terminó segundo en el campeonato 2023 con solo la mitad de los puntos que su compañero de equipo Max Verstappen, que consiguió 19 victorias, una cifra sin precedentes, mientras Red Bull disfrutaba de un dominio total con su RB19.
Después de un comienzo brillante en el que ganó dos carreras y le pisó los talones a Verstappen en el campeonato, las chances de Pérez en el campeonato decayeron en junio, cuando sus problemas de rendimiento causaron un aumento de la especulación sobre su futuro con el equipo, cuyo actual acuerdo expira a finales de 2024.
Pérez, que se sinceró con Motorsport.com sobre los retos a los que se enfrentó en 2023, cree que la clave para asegurarse un nuevo contrato es romper la tendencia de no adaptarse a las mejoras del coche de Red Bull durante el año.
«Quiero ser capaz de alcanzar la regularidad, de construir una plataforma», dijo al ser preguntado qué necesita para ganarse un nuevo contrato con Red Bull.
«Lo que nos ha faltado este año es progresar. Empecé el año muy arriba, a la par que Max. Pero no fui capaz de evolucionar a lo largo de la temporada. En todo caso, a veces he ido hacia atrás. Así que esa es probablemente mi principal prioridad, ser capaz de progresar a lo largo de la temporada».
Un tema común para «Checo» Pérez durante sus tres años en Red Bull ha sido sus inconvenientes para adaptar su estilo de conducción a las demandas únicas de cómo se desarrollan los coches de Red Bull, con los que Verstappen está más en sintonía.
Pérez a menudo comenzó los fines de semana de carrera con el pie izquierdo después de no encontrar una dirección de puesta a punto adecuada en los entrenamientos del viernes, lo que lo dejaba con una montaña que escalar para acercarse al potencial del coche.
En 2023 esos problemas comenzaron en Barcelona, que fue el primero de los cinco fines de semana (sin contar el accidente de Mónaco) en los que Pérez no logró clasificarse en la Q3 con el coche dominante del campeonato.
Sergio Pérez, Red Bull Racing
Al ser preguntado por Motorsport.com sobre qué pasó con el RB19 a partir del Gran Premio de España que se lo puso tan difícil, respondió: «Sentí que el coche era diferente y tenía que pensar mucho más en cómo conducía que antes. Así que ese fue un poco el cambio del año».
«Empezamos el año con mucha fuerza en las cinco o seis primeras carreras, pero luego no pudimos progresar con el coche. Y creo que eso es algo que me ha faltado este año y que quiero mejorar enormemente el año que viene».
«Estos problemas me han hecho entender mucho mejor cómo estaba configurando el coche, en qué dirección tengo que ir cuando tengo problemas. Creo que es algo que nos hará más fuertes el año que viene».
Pérez dio un primer paso adelante después de pasar tres días en Milton Keynes con los ingenieros y trabajando en el simulador tras un fin de semana desastroso en el Gran Premio de Qatar, pero cree que hay más ganancias que hacer durante el receso.
«Durante el invierno vamos a dedicar tiempo con los ingenieros para repasar las cosas», explicó.
«Aparte de eso, nos centraremos en asegurarnos de que somos capaces de progresar a lo largo de la temporada. Creo que eso es lo principal».