En las últimas tres carreras, George Russell ha conseguido un quinto y dos sextos puestos, mientras que su compañero Lewis Hamilton ha logrado un podio y dos cuartos puestos en la lucha de Mercedes con McLaren y Ferrari por ser el segundo equipo más rápido.
Desde el fin de semana del Gran Premio de Austria a principios de julio, Russell ha dicho en varias ocasiones que «las cosas no funcionan» entre él y el W14.
Cuando el jefe del equipo, Toto Wolff, fue preguntado por la baja de desempeño de Russell, dijo que la dificultad de encontrar un punto dulce en el coche de este año ha afectado al piloto más joven del equipo.
«Estos coches están en el filo de la navaja, y puedes caer rápidamente y perder la confianza», dijo Wolff.
«Y en el otro lado, si estás dentro de ese momento del punte dulce -aunque dicho esto, ese coche no tiene un punto dulce- pero estando más en esa zona de entender lo que hará a continuación, creo que hay una gran diferencia».
El jefe técnico Mike Elliot coincidió en que la necesidad de esta era de coches con efecto suelo de rodar cerca del suelo hace más difícil mantener el equilibrio adecuado en una vuelta.
«Creo que estos coches son difíciles de conducir cuando ruedan pegados al suelo», añadió Elliot.
George Russell, Mercedes F1 W14, Lance Stroll, Aston Martin AMR23
Foto: Michael Potts / Motorsport Images
«Es difícil encontrar el equilibrio adecuado en las curvas y es complicado tratar con la rigidez de los coches.
«George es un piloto fantástico. Estoy seguro de que George conseguirá lo que necesita para llevar el coche bastante rápido».
Russell no cree que el cambio de diseño del coche en Mónaco haya jugado en su contra, ya que la sensación en el coche no ha cambiado mucho en comparación con cómo se sentía al principio de la temporada.
Su único podio de la temporada, un tercer puesto en España, llegó después de la renovación.
«No, no lo creo. Creo que es sólo el ritmo», respondió el sábado cuando se le preguntó si su bajón estaba relacionado de alguna manera con las mejoras.
«El coche tiene unas sensaciones bastante parecidas a las que tenía a principios de año. Algunos pequeños cambios, pero nada que ver con las actualizaciones.
«A veces las cosas salen como quieres y tienes confianza. A veces pierdes un poco de confianza y eso te afecta».
Después del Gran Premio de Bélgica del domingo, el último evento antes de las vacaciones de verano, Russell se sentía mejor para atacar el problema en la segunda mitad de la temporada, después de haber encontrado algunas respuestas a por qué las recientes opciones de puesta a punto no han funcionado para él.
«Diría que las seis primeras carreras fueron muy buenas, las seis últimas no tanto. [Tenemos] algunas ideas de por qué», explicó tras terminar sexto en Spa-Francorchamps.
«Este fin de semana ha demostrado que la dirección que hemos tomado con la puesta a punto en las últimas carreras no ha sido la correcta.
«Definitivamente se puede ajustar».
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